José Pablo Quevedo

José Pablo Quevedo

Personalmente admiro el trabajo literario de José Pablo Quevedo, hombre excepcional, comprometido con la defensa intelectual y social de su pueblo, lo conocí un 22 de agosto de 2007 en Huacho, cuando vino al Perú para cumplir con una serie de presentaciones literarias, entre ellas el I coloquio de literatura joven “Alfredo Torero Fernández de Córdova” realizado por la Sociedad de Poetas y Narradores de la Región Lima, después de su excelente presentación en el Encuentro Mundial de Poetas realizado en Cuenca Ecuador. En esa ocasión me correspondió el honroso privilegio de recibirlo en el Terminal terrestre de Huacho en compañía de mi señora esposa. Destacado y virtuoso hombre de las letras peruana radicado en Bernau Alemania desde la década de los 70; me impactó su manera sencilla de ser, el típico hombre de pueblo claro y directo en sus expresiones, esa noche el auditorio de la casa de la cultura se vistió de gala, su presencia fue todo un reto y un llamado a la juventud, al cual respondieron colmando las butacas del auditorio. José Pablo Quevedo, es uno de los buenos exponentes de la poesía filosófica, en nuestro país, sus temas son ampliamente conocidos, cito algunos de ellos:

Dialéctica en Regresión a la Realidad Peruana
Dialéctica en Regresión a la Realidad Latinoamericana
La totalidad y las parcelas de la Poesía Peruana
Los Ríos y los Molinos
Incursiones por el mundo de la metáfora y la meditación Filosófica
En Regresión histórica de la realidad Peruana
En torno a una Iniciativa: Lo repetitivo y lo que superamos
Los Molinos de la Memoria
Poesías contra la Guerra
En la Totalidad y las parcelas de la literatura Peruana.
Los Molinos de la Noche

http://sociedaddepoetas.iespana.es/enlaweb.html

Bien merecen las obras del poeta Piurano José Pablo Quevedo, estar en las mejores revistas literarias del mundo, recientemente en Santiago de Chile se editó varias de sus obras para niños en tres idiomas con fotos e ilustraciones del prestigioso gráfico Santos Chávez. De igual manera es frecuente ver sus trabajos en portales de literatura a través de la Web, como: “Alhucema” España, “Isla Negra” Argentina, “Poetas del Mundo” Chile, “Casa del Poeta Peruano” Lima, “Sociedad de Poetas y Narradores” Huacho, “Conglomerado Cultural” Chiclayo, “Viernes Literario” Lima, “Cometa de Papel” Tacna, La Revista de Poesía "Paradoja" USA, entre otros. Escribir de José Pablo bastaría mas de un millar de hojas, son tantas las paginas escritas por el autor que fácilmente podemos darnos cuenta de su comprometido labor literario para con nuestra sociedad. Además he leído detenidamente su tema sobre el poeta Leoncio Bueno Barrantes; en la Totalidad y las parcelas de la literatura Peruana, así mismo los Molinos de la noche, donde el autor hace uso de una bien aplicada gala de notas literarias, el Critico literario nacional Raúl Gálvez Cuéllar opina también al respecto y dice: "Debemos reconocer sin menoscabo que actualmente José Pablo Quevedo representa una de las mas altas notas de la Poesía en nuestro Continente; Nuestro poeta de la metáfora histórica, o si se quiere Filósofo de la Historia, asume en este contexto una poesía filosófica en la que muestra su elevado, profundo y claro razonamiento. Los Molinos de la Noche acusa depurada estilística, en un fondo donde se percibe el alfa y el omega, apuntalando un devenir de connotaciones hidrográficas que develan en todos los tiempos al eterno movimiento que produce la metamorfosis de la naturaleza, del hombre y de la sociedad. Para interpretar al poeta y analista José Pablo se requiere una previa concentración y alguna experiencia valorativa en cuanto a categorías filosóficas que nos permita clasificar la jerarquía en sus versos, y descubrir la intención de rangos que se confiere en la elaboración poética. En varias ocasiones me he referido a la literatura quevediana, subrayando sus características en temas y estructura que aún mantiene, no obstante que también lo haya tildado como al poeta de las mil voces. En efecto, nadie sabe cómo va a escribir JPQ: al análisis de sus libros hemos distinguido sus diversas facetas, y nada nos impide considerar que Los Molinos de la Noche pueda ser la consumación de su trajinar poético, si se tiene presente que José Pablo también se dedica al ensayo y a la Novela, así como a otras actividades artísticas".

Como podemos darnos cuenta José Pablo Quevedo, distinguido literato y amigo personal, es unos de los firmes exponentes de la literatura Social, comprometida con su pueblo cuyas obras trascenderá a través del tiempo dejándonos un valioso legado de amor por las letras.

El Poeta José Pablo Quevedo rodeado de jovenes Huachanos

A una estatuilla

Tienen fuego de sol los ojos
de un herrero.
En un relámpago de fuerza
moldea una percha
o una vasija.
Sus manos pueden hacerte alada
o ánfora.
Tú sonríes eterna habitante
de una nube.
Mi máquina de escribir
te entrega poemas del alba.
Sonríe,
pero no olvides
que eres luz de una estrella,
fuego
por la fuerza de un herrero.

Fedra

Como habíamos perdido el camino
hacia la estación de las hojas verdes,
te dije: ¡Imitemos a la lluvia!
La lluvia no tiene ojos,
es libre.
Su corazón estalla en vegetación.
En una nube tiene sus raíces
que da el color a las cerezas.

La lluvia es constante
golpea a los automovilistas.
Transparente rueda por las calles,
destruye lo inservible.
Los cadáveres temen su corazón de música.
Imitemos a la lluvia,
huyamos Fedra.
Otra estación que nace nos espera.

No preguntes más

No preguntes más,
soy como soy. Tú me quisiste así,
indomable,
igual que un océano
herido por sus tempestades.
No preguntes más,
así soy. Así son los hombres
que derriban soledades,
que desgarran la pobreza entre sus manos.
Tú sólo eres la estación
donde vienen pálidos dulzores
o el verano alegre que levanta días de fuego.
No preguntes más,
solo abre tus párpados,
fulgura sobre mi universo,
sobre mis manos que hurtan incansables
la luz de tu cuerpo.
No preguntes más,
pero déjame que caiga como un gigante sueño
sobre tus ojos vacíos,
déjame que traiga noches inmensas
a esa aldea que tuvo tu infancia.
Yo te amo. Te llevaré a cada batalla
donde haya que construir algo,
donde haya que cambiar la vida.
No preguntes nada, nada,
sujétate sobre mis hombros
que ya crecen desde la tierra,
impúlsate con mis manos
que son invencibles
penetra en mi sangre
que es incendio de un sol mojado
sediento de tierra y de vida.
Tuyo soy, mía eres,
no preguntes más.