POESÍA Y PINTURA
Despuès de los inviernos limeños suele aparecer un sol que recompone ànimos friolentos. Yo acostumbraba a tenderme cara al sol, en un colchòn delgado, un pedazo de alfombra o de tapizòn, y lo hacìa con mi esposa Lucyta, a veces acompañados de nuestro ùltimo hijo Jesùs. Ibamos a la azotea y gozàbamos de sus rayos que tanto se extraña en los inviernos. Algunos dìas y para no subir escaleras me echaba sobre estos "colchones" en el umbral de la puerta de calle, con la puerta entreabierta, què felicidad era la que sentìamos bajo el sol entibiando nuestros cuerpos.
Un dìa -domingo debiò ser, no recuerdo- , pasò un buenhombre por el parque frente a casa, vendiendo perezosas y otros muebles por el estilo. Y sin pensarlo dos veces comprè una perezosa.
Como poco se usaba, fue a dar en la azotea y todos nos olvidamos de ella.
Al cabo de algunos años se me ocurriò llevarla a nuestro pequeño e ìntimo Retiro de Santa Eulalia por la Carretera Central. Nunca imaginè que un dìa en ella descansara ¡y durmiera! Julio Solòrzano Murga, mi buen amigo y excelente poeta huachano. Ni menos que luego de unos dìas de esta efìmera siesta, escribiera su poema "La Perezosa del Poeta".
Mi querida sobrina Fresia Valdivia Gàlvez tiene en exhibiciòn una pintura donde aparece un hombre descansando plàcidamente en una perezosa. He escogido este cuadro para Portada de uno de mis libros que si Dios quiere aparecerìa a fines de este año. La pintura es magnìfica, y no lo digo porque sea de mi familia, sino porque impone admiraciòn y elogios de todos cuanto la ven. Parece tan pero tan real, que hasta me hizo recordar cuando en el Louvre estuve frente a La Gioconda, y mi compañero de estudios de entonces (eran los años setentas), el Mayor en actividad del Ejèrcito Ecuatoriano Hèctor Del Coral me dijera ..."mira Raùl, si a nosotros que no somos pintores este cuadro nos impresiona, ¡còmo serà para los verdaderos artistas!..."
El poema La Perezosa del Poeta de Julio Solòrzano ya es indesligable del arte de Fresia Valdivia: poesìa y pintura andan juntas, y estoy seguro que daràn mucho que hablar en este tiempo en que el arte en general amenaza languidecer aùn màs, cuando por el contrario debe renacer cada dìa con mayor vigor y realismo.
Raùl Galvez Cuèllar
Un dìa -domingo debiò ser, no recuerdo- , pasò un buenhombre por el parque frente a casa, vendiendo perezosas y otros muebles por el estilo. Y sin pensarlo dos veces comprè una perezosa.
Como poco se usaba, fue a dar en la azotea y todos nos olvidamos de ella.
Al cabo de algunos años se me ocurriò llevarla a nuestro pequeño e ìntimo Retiro de Santa Eulalia por la Carretera Central. Nunca imaginè que un dìa en ella descansara ¡y durmiera! Julio Solòrzano Murga, mi buen amigo y excelente poeta huachano. Ni menos que luego de unos dìas de esta efìmera siesta, escribiera su poema "La Perezosa del Poeta".
Mi querida sobrina Fresia Valdivia Gàlvez tiene en exhibiciòn una pintura donde aparece un hombre descansando plàcidamente en una perezosa. He escogido este cuadro para Portada de uno de mis libros que si Dios quiere aparecerìa a fines de este año. La pintura es magnìfica, y no lo digo porque sea de mi familia, sino porque impone admiraciòn y elogios de todos cuanto la ven. Parece tan pero tan real, que hasta me hizo recordar cuando en el Louvre estuve frente a La Gioconda, y mi compañero de estudios de entonces (eran los años setentas), el Mayor en actividad del Ejèrcito Ecuatoriano Hèctor Del Coral me dijera ..."mira Raùl, si a nosotros que no somos pintores este cuadro nos impresiona, ¡còmo serà para los verdaderos artistas!..."
El poema La Perezosa del Poeta de Julio Solòrzano ya es indesligable del arte de Fresia Valdivia: poesìa y pintura andan juntas, y estoy seguro que daràn mucho que hablar en este tiempo en que el arte en general amenaza languidecer aùn màs, cuando por el contrario debe renacer cada dìa con mayor vigor y realismo.
Raùl Galvez Cuèllar
LA PEREZOSA DEL POETA
LA PEREZOSA DEL POETA
Tiene el Poeta en su finca
Una reconfortante perezosa
Que el solo hecho de reposar
Placidamente sobre ella
Te olvidas fácilmente del tiempo
Peculiar sentido de descansar
Al aire libre, acariciando el sueño
Con aroma de retama y eucalipto
Con silbidos del tren a la distancia
Con arrullos del río en tus oídos
Fragante manera de reposar al alma
Ilusa cabalgata de sueños postergados
Recodo de la vida en feliz descanso,
Perezosa del poeta, cometa del placer
Acurruca mi alma quiero verme nacer.
Bajo el sol de las verdes praderas
Bajo la sombra de tus inmensos cerros
Que acordonan a Santa Eulalia, Huarochirí
Dando bello panorama a la finca del poeta
Que imponente se ve, con el sol a cuestas
Una hora de descanso que me pareció un día
Sosegado en la perezosa con los pies sobre la silla,
Vi como mi vida en sueño era toda alegría,
Danzas, cantos y poesías; Paz, amor y vida,
Finca del Poeta, refugio del placer en un día.
Tiene el Poeta en su finca
Una reconfortante perezosa
Que el solo hecho de reposar
Placidamente sobre ella
Te olvidas fácilmente del tiempo
Peculiar sentido de descansar
Al aire libre, acariciando el sueño
Con aroma de retama y eucalipto
Con silbidos del tren a la distancia
Con arrullos del río en tus oídos
Fragante manera de reposar al alma
Ilusa cabalgata de sueños postergados
Recodo de la vida en feliz descanso,
Perezosa del poeta, cometa del placer
Acurruca mi alma quiero verme nacer.
Bajo el sol de las verdes praderas
Bajo la sombra de tus inmensos cerros
Que acordonan a Santa Eulalia, Huarochirí
Dando bello panorama a la finca del poeta
Que imponente se ve, con el sol a cuestas
Una hora de descanso que me pareció un día
Sosegado en la perezosa con los pies sobre la silla,
Vi como mi vida en sueño era toda alegría,
Danzas, cantos y poesías; Paz, amor y vida,
Finca del Poeta, refugio del placer en un día.
Julio Solórzano Murga
Santa Eulalia, 06 de Enero 2008
Finca del Poeta Raúl Gálvez Cuéllar
Santa Eulalia, 06 de Enero 2008
Finca del Poeta Raúl Gálvez Cuéllar
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