MARIATEGUI Y LA LITERATURA (*)

27 diciembre 2015

Por: Manuel de la Cruz Ódar Bejarano.


“¿Ustedes no saben quién es Mariátegui” Es una nueva luz de América, una categoría nueva del hombre americano” (HENRI BARBUSE, citado por Genaro Carnero Checa en “La Acción Escrita”

Uno de los más grandes pensadores del Perú y América nació un 14 de junio de 1895; murió el 16 de abril de 1930, a los 35 años de edad. Sin embargo, a pesar de su desaparición física a tan corta edad, nos legó una frondosa producción literaria, la que abarcó diversos tópicos del quehacer humano, siendo los aspectos sociales, ideológicos, políticos, laborales y económicos, a los que más atención les brindó. Ahí quedaron como una prueba fehaciente de lo que decimos sus “7 ensayos…”, “La Escena Contemporánea, la revista “Amauta”, el periódico “Labor”, y cientos de trabajos, publicados a través de periódicos, revistas y boletines de la época, no sólo en el Perú y América, sino también en Centro y Norteamérica y en muchos países del mundo.

José Carlos Mariátegui es uno de los referentes cumbres de las letras peruanas. Y no solo eso, sino que fue más allá y su pensar lo plasmó en organizaciones sociales, políticas, educativas y sindicales, las que apuntaban a un cambio en las sociedades y pueblos latinoamericanos, colonizados y esclavizados por el capitalismo reinante a comienzos del siglo XX (como lo sigue haciendo hoy, y aún con más ferocidad).

Y en lo referente a la literatura en sí (entendida ésta en cuanto concierne a poesía, narrativa, crónica, ensayo, etc.) Mariátegui, solo en sus “7 Ensayos,..” dedicó más del 35 % de esa obra a tratar el tema literario. Criticó ácidamente, por suposición conservadora, nostálgica, colonialista, españolizante y hasta anti peruana a escritores de la talla de Felipe Pardo y Aliaga y José Antonio Lavalle, y lo hizo también contra sus exégetas, uno de ellos, José de la Riva Agüero.

En cambio, sí tuvo frases encomiables para los que representaba el alma peruana, por su originalidad o su identidad con lo criollo, lo costeño o lo andino, por su novedosa construcción en lo poético o por su identificación con un porvenir más justo, no solo para los peruanos en la “…formación de un Perú integral, de un Perú nuevo”, sino para con la humanidad toda. De ahí su clara identificación con el Inca Garcilaso de la Vega, Melgar, Palma, Gonzales Prada, Abelardo Gamarra, Vallejo, Luis E. Valcárcel, Enrique López Albújar, José María Arguedas, etc.

El tiempo le viene dando la razón al Mariátegui literario. Las obras de los escritores a quienes El Amauta saludó y elogió como las más representativas de las letras peruanas, siguen siendo reeditadas, leídas y discutidas, y nuevos y muchos más autores de han adherido a la corriente vanguardista, nacionalista ( y por nacionalista, latinoamericana) que Mariátegui representó y aún representa.

Sería largo enumerar los casos de ensayistas, narradores, poetas – hombres y mujeres – que han dado y siguen dando lustre al arte literario peruano, siendo todos ellos parte del quehacer intelectual del Sur y Centro América, de clara aceptación universal.

Bien ya lo decía el preclaro y periodista Genaro Carnero Checa “…el nombre de José Carlos Mariátegui es ya inseparable del proceso general de la cultura y de la política en el Perú y en toda américa…” (2) Y poéticamente, Pablo Neruda dijo una gran verdad: “Sobre Mariátegui seguirá cantando el mar”.

Un recuerdo y una flor roja para el gran Amauta José Carlos Mariátegui al recordarse el 80* aniversario de su fallecimiento, coincidiendo, además, con el inicio del Ciclo cultural Ex Poesía, algo de mucha trascendencia para quienes seguimos indesmayables el camino trazado por el gran Amauta José Carlos.-



(1) Artículo publicado en abril de 2010, con motivo del inicio del Ciclo Cultural  Ex Poesía, realizado en La Perla, Callao.
(2) Pablo Neruda dijo una gran verdad: “Sobre Mariátegui
(3) Algo totalmente opuesto a lo recientemente dicho por el nieto de José Carlos, el inefable Aldo Mariátegui, en su “Octavo Ensayo”. (Mariátegui es) ”Un romántico intelectual urbano de escritorio” Ibíd. Pág. 90.- Ediciones Planeta, Noviembre 2015.




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