HUACHO SE MERECE UN PORTENTOSO MUSEO REGIONAL

29 diciembre 2011

Por: JOSÉ FERNÁNDEZ SÁNCHEZ



Sólo los prevenidos ciudadanos e inquieta juventud, conocedores de de nuestra rica e insondable historia, podrá caer en la cuenta, la imprescindible necesidad que tiene el Norte Chico, de un gran museo histórico cultural, más allá de las prioridades del Ministerio de la Cultura o la Casa de la Cultura de Huacho.

Si sólo diéramos un ligero vistazo por la historia que nos hace merecedores de identificar, preservar y ostentar nuestra memoria regional, las autoridades, líderes, instituciones y la sociedad civil, de todos los campos del quehacer cultural, educativo, mediático, social, político y económico, serían los primeros en apuntalar la formación de un moderno museo regional, juntamente con una Facultad de Arqueología e historia.

Nuestra tradición histórica de miles de años de la presencia humana, desde el oscuro periodo Inicial o lítico, hasta el día de hoy. Lamentablemente este espacio ni siquiera nos permite pincelar los principales hitos del paso histórico de nuestros ancestros. Pero eso sí, llamar la atención de una gran ausencia.

Muchos son los historiadores, arqueólogos, antropólogos, etnohistoriadores y sociólogos de fuste que se rinden ante la abrumadora presencia de fuentes que están saliendo a la luz tras un cuidadoso y disciplinado tratamiento científico. Que revelan la inmensa carga documental como monumental. Historiadores que trascienden a la descripción, con minucioso análisis interpretativo de los grandes procesos histórico-culturales.

Mientas tanto, un buen y selecto sector de la ciudadanía, como muchos docentes estamos impacientes de percibir objetivamente todas las formas expresivas de nuestra historia regional. Porque no es justo, sabiendo que somos la cuna de la civilización continental, no tengamos a la vista las pruebas de esta extraordinaria verdad. Aun más, comprobado fehacientemente que nuestra historia a partir del siglo XV al presente, está llena de grandes procesos y acontecimientos, como pocos pueblos del Perú pueden demostrar, tengamos que reducir los conocimientos histórico a la malhadada historia oficial,

Toca por fin, a los investigadores, divulgadores, maestros y estudiantes asumir la gran tarea de dilucidar y prevalecer una historia académicamente actualizada, con el soporte pedagógico de nuevas formas curriculares, sobre todo en lo pedagógico y en los contenidos propiamente dichos, diversificados y trabajados desde nuestra propia realidad.

Por de pronto, desde el ámbito pedagógico, cultural y turístico, nuestra región nor central requiere con urgencia de un impresionante museo, como que impresionante es nuestro pasado. Si consideramos el elemental concepto, de que la función hace a órgano y que la necesidad demanda respuestas palpables, estamos pues ante una situación, que exige el apoyo de nuestras organizaciones y poderes regionales para encausar esta prioridad.

Un gran museo, requiere tener claro tres aspectos esenciales. La prioridad, la posibilidad y la vocación. Ver la cultura más allá de los cálculos electoreros, el respeto por nuestra elemental identidad cultural o la probada capacidad de compartir en invertir por la cultura, estaremos logrando ya bastante. Aquí estamos invocando a los maestros, padres de familia y el periodismo para que se constituyan en sectores de presión ante nuestras autoridades locales y regionales.

Si bien es esencialmente indispensable la presencia de los museos locales, tan modernos como el del Végueta, y de los otros, también es sumamente indispensable un gran museo que acoja los vestigios de toda la región nor central. Pues no podemos separar lo que la historia regional nos ha prodigado, desde hace miles de años.

En lo pedagógico, toca a los propios maestros, ponderar e innovar el currículo escolares coherentes con nuestra realidad histórica y cultural, más allá de las vetustas y parciales versiones de la historia conven-cional; los mismos que deben conducir esta inquietud para que nuestra región tenga un buen museo, con salas para cada época y región, para cada tecnología y cada proceso cultural. De paso rendir justo reconocimiento a los que han trabajado por nuestro pasado: Rosa Fung, Mercedes Cárdenas, Domingo Torero y Alfredo Torero, Arturo Ruiz Estrada, Álvaro Ruiz Rubio, Ruth Shady, Filomeno Zubieta, Miguel Silva, Alejandro Chu, Pieter Van Dalen, Elías Ipinze, Emilio Rosas, entre muchos otros. Del mismo modo, con guías de visita y mate-rial de lectura para cada sitio arqueológico e histórico de nuestro frondoso patrimonio material e inmaterial.

La pelota está ahora en el campo de nuestras autoridades, maestros y líderes de opinión, con ocasión que celebramos grandes fechas históricas: el desembarco de la expedición libertadora, las proclamas de la independencia de los pueblos de Pativilca, Aucallama e Ihuarí; proclama de la Independencia de San Martín en Huaura; la elevación de Huacho a la condición de ciudad capital de la antigua provincia de Chancay; inauguración de la primera biblioteca popular; fundación del Centro Federado de Periodistas (Filial Huacho), la creación del distrito de Paramonga, fundación del museo arqueológico de la UNJFSC, Instalación de Distrito Judicial de la provincia de Huaura, la creación del escudo de Huacho, entre otros acontecimientos.

2 comentarios:

daniella dijo...

http://lapinturaytu.blogspot.com/2012/01/vincent-van-gogh.html#comment-form

daniella dijo...

Es cierto el Perú se merece espacios para mostrar nuestra historia, además ello generará más turismoy en consecuencia más trabajo para los peruanos.

Gracias a Dios hay personas que por amor al Perú han creado organizaciones o empresas con el fin de difundir la historia, el arte, gastronomía y demás manifestaciones peruanas.

Ingrid Yrivarren, directora de Viva Perú, lleva las expresiones culturales a México, y como consecuencia se logra crear relaciones con este país.

Realmente pido a las autoridades correspondientes que este museo pueda surgir para que funcione como un puente para nuestras expresiones culturales e históricas.