CARTA A MI MADRE

08 mayo 2015

Madre, ayer después de muchos años
pasé por la vieja casona donde vivíamos
me acordé de aquellos días vividos en Cruz Blanca
donde descalzo jugueteaba con los niños del barrio
cuando me trepaba por la vieja higuera de don Miguel
y tú siempre me mirabas, cuidando de que no me hiciera daño.
Acosté mi cabeza por unos segundos, sobre sus muros derruidos por el tiempo,
me acordé del viejo cine Avenida, donde cada domingo me llevabas en matiné.
Madre,  ya no está el pilón de agua al cruzar la Panamericana
que estaba frente al Círculo deportivo Cruz Blanca;
pestañeé por unos segundos llamando al recuerdo de esos días maravillosos
y mis oídos parecían estar  escuchando los ensayos de la orquesta Continental.
Madre! Ayer pude ver tu frente sudorosa, tus ojos tristes, muy cansados
sentada ahí, pedaleando tu vieja máquina de coser  Singer,
te vi haciendo vestidos blancos de lino con blondas doradas,
y ... yo muy feliz diciendo a mis amigos, mi Madre, mi Madre  es Costurera.
Hoy después de tantos años pude ver la vieja casona
aquella que me daba miedo, cuando salías a entregar tus costuras
y a tu regreso nos llenabas de besos, nuestros ojos lloraban de felicidad,
llegabas con el pan bajo el brazo y más trabajo para mañana,
y tú, cantando suave, muy suave, nos decías a mí y mis hermanitos !Los Amo!
Madre, hoy después de muchos años, sé lo que es dormir despierto
no necesito cerrar mis ojos para verte,
cada día estás junto a mí, cada noche silente escucho tu voz..

Madre, saluda a mi hermana Zoila que está contigo allá en el Cielo.


Tu hijo que te quiere


Julio Solórzano Murga
Huacho, Mayo del 2015


No hay comentarios: